Y es que un baño sin accesorios no es un baño completo, es como un pastel sin su guinda.
Son piezas pequeñas que dotan de personalidad a tu baño y lo hacen más cómodo y práctico, ya que nos sujeta y nos pone a la mano toallas, papel higiénico, jabones,…
Podemos diferenciar varios accesorios de baño como:
- Los que se instalan con tornillos a la pared.
- Los que no necesitan instalación a la pared ya que van en el suelo o encima del mueble de baño
- Y los que se instalan pegados a la pared.
Hoy te quiero hablar de estos últimos, ya que son los que crean más dudas a nuestros clientes.
Estos accesorios tienen una ventaja respecto a los atornillados, ya que no se necesita de taladro para su instalación y son muy fáciles de instalar.
Como van pegados no se tienen que agujerear los azulejos de tu baño y como consecuencia no corres el riesgo de hacer un agujero a la tubería de agua. Ya que por muy grande que sea el baño cuando haces un agujero seguro que lo haces sobre la tubería. Jejejeje.
Además si estos son de buena marca te aseguramos que son seguros y si se instalan según las recomendaciones del fabricante no caerán. Son tan fuertes que necesitarías una espátula o cuchilla para despegarlos.
¿Cómo se instalan?
Lo primero que hay que tener en cuenta es que necesitan una superficie lisa (no pegar sobre azulejos con ondas).
Después de saber donde tiene que ir situado cada accesorio de baño, hay que limpiar la superficie con alcohol y secar la superficie, y marcar bien donde va a ir instalada. Luego hay que pegar la base del accesorio y presionar de 30 a 60 segundos.
Se recomienda no utilizar los accesorios hasta que no pasen 24 horas.
Espero que te haya servido este artículo y si tienes alguna duda envíame un email a info@tinojornet.com.